lunes, 4 de mayo de 2009

PROPIEDAD DELA TIERRA Y VIOLENCIA EN EL CAUCA Y BAJO CAUCA.



PROPIEDAD DE LA TIERRA Y VIOLENCIA EN EL CAUCA.-

Algo a raíz de las invasiones por el despojo a los indígenas en el nororiente del Cauca.

“los dirigentes patriotas, Simón Bolívar y Santander, como incentivo para reclutar tropas, les ofrecían a los jóvenes en edad de luchar, hacerse propietarios de las tierras de los adeptos a la causa realista”.


Por: MARIO MONTENEGRO MONTILLA
Egresado en economia politica en; The Henry George School Of Social Science.CUNY. New York.


“La desmovilización de los paramilitares y las condiciones para que esto suceda, en lo relacionado con el juzgamiento por sus diversos crímenes, la restauración moral y material a las victimas, la devolución de los predios apropiados por la fuerza, el desarme y desmantelamiento total de sus organizaciones y en momentos en que todo el Cauca, las comunidades indígenas Paeces y Guambianas promueven en diferentes municipios ocupaciones de hecho de varias haciendas situadas en áreas montañosas y planas, y los campesinos no indígenas y las negritudes alegan que ellos también tienen derecho a que les favorezca el Estado en políticas de una Reforma Agraria, resurge un punto clave en la historia de la propiedad de la tierra en Colombia, y es la intima ligazón a la violencia y el despojo desde la Conquista , cuando llegaron los españoles a imponer su visión del mundo, costumbres y cultura a grupos indígenas que no conocían los cercos y para quienes el oro, no valía más que el cacao, o la sal que eran sus principales medios de trueque”, anotaba el Historiador y periodista quilichagueño, Felipe Solarte Nates, respecto a lo acontecido con los lamentables hechos sobre las invasiones recientes a partir del 12 de octubre del 2007–Día de la Raza-.en el Departamento, por parte de cerca de 42 mil indígenas que solicitan les adjudiquen tierras, ya que el Cauca tiene más de 300 mil hectáreas baldías y 690 propietarios mestizos que venden voluntariamente al gobierno sus tierras. Y los indígenas tienen casi 751 mil hectáreas, que les dan un promedio de minifundios de 2 y 3 hectáreas para medio sobrevivir en zonas montañosas del Cauca, y no son terratenientes como lo dijo el Gobernador del Departamento Juan José Chaux Mosquera..
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Nosotros; haciendo historia sobre la tenencia de la tierra en el Cauca esclavista de hoy, y teniendo como base varios textos de historia general consultados para aclarar, ¿el porque? Los indígenas del nororiente del Cauca, están invadiendo haciendas y predios en zona plana del norte, solicitando les cumplan en el 2005, los compromisos firmados por representantes del gobierno nacional, en la toma de la carretera Panamericana que duró más de un mes, y Departamental. Desde la gobernación de Cesar Negret Mosquera, hasta el Gobernador de hoy, Juan José Chaux Mosquera, -dignos descendientes de esclavistas-. Con respecto a la propiedad privada, y sin diálogos o negociaciones hasta que no desocupen los predios invadidos, se ha desplegado una represión de tal magnitud, que ya lleva varios muertos indígenas (hacienda Japio) de la guardia civil, incluido un niño y heridos de parte de la policía y el ejercito, en las fincas y haciendas de los municipios de ; Caloto, Puracé, Popayán y Totoró, por parte de los indígenas paeces y guambianos., quienes dieron inicio a las invasiones siguiendo las orientaciones del 12 Congreso del CRIC, celebrado en Caldono en enero de 2005., para presionar al gobierno nacional, la entrega de 6.600 hectáreas de tierra firmados por anteriores administraciones, a raíz de la masacre de 21 indígenas en la hacienda EL NILO, en las haciendas “recuperadas” o tomadas de Japio, La Emperatriz, el Guayabal Munchique- los tigres y otras..

Volviendo a las reseñas investigativas, y aunque en la historia de la humanidad, casi toda la conquista y guerras han estado acompañadas del arrasamiento de las propiedades de los vencidos, el despojo de sus tierras y riquezas, la violación de sus mujeres y la muerte o esclavización, en el caso de las Guerras de Conquista en la América de influencia hispana y portuguesa, pues los anglosajones, llegaron fue a exterminarlos, como en Norteamérica recordando el 12 de octubre (Columbus Day) o día de la Raza, después del despojo del oro, plata y piedras preciosas, el apoderarse de las tierras, fue el principal objetivo de los conquistadores para “hacer su América” y aspirar algún día a retornar a la metrópoli europea, ya no como los expresidiarios o hijos de algo (hidalgos) sino como ricos señores, sin olvidar que con la “plaga” o “chusma” del populacho hambreado y ambicioso, llegaron algunos “adelantados”, con mayor formación y capacidades intelectuales acondicionadas a los intereses del Rey Fernando VII , y sin dejar a un lado al clero dirigido por el Vaticano, que llegaron a lavarles el cerebro a los nativos, más tarde con la burocracia de oidores, virreyes, encomenderos, escribanos, notarios y demás, que conformaron la triada de la cruz, la espada y el papel sellado, con que se legalizó la dominación.
Ya los propietarios de vastos terrenos, para poder aprovecharlos, algunos con Vocación de agricultores, importaron plantas y animales de España y otras latitudes, como la caña de azúcar, el trigo, los caballos, vacunos, ovejas y cerdos que poco a poco a medida que se daba el mestizaje con los indígenas, aprendieron a consumir y a cultivar productos como el maíz, la papa, la yuca, el pimentón, el tomate, la ahuyama, el cacao y gran diversidad de frutos tropicales que encontraron en el Nuevo Mundo.
Pero teniendo en cuenta que en la mentalidad hispana de la época, el trabajo material deshonroso para los “señores” y en vista de que la mayoría no tenia tradición de agricultores, ni de artesanos, y principalmente les interesaba el oro y los metales, se concentraron en la minería, esclavizando primero a los indígenas, hasta casi exterminarlos y después, a través de los portugueses, importando millones de esclavos africanos desarraigados de los numerosos países de la costa occidental del continente africano.

Se establece la propiedad de la tierra


-Así a partir del desalojo violento, se estableció la propiedad de la tierra en Colombia y lo siguió siendo después, cuando los mestizos de los Comuneros de José Antonio Galán se revelaron en San Gil , el Socorro y Charalá , contra los excesivos impuestos y el monopolio de la producción y el comercio de las telas, tabaco y aguardiente, a los que sometió la Corona Española para financiar sus numerosas guerras, preparando el terreno para la Independencia del país, periodo en el cual, en los momentos más álgidos de la lucha, los dirigentes patriotas, Simón Bolívar y Santander, como incentivo para reclutar tropas, les ofrecían a los jóvenes en edad de luchar, hacerse Propietarios de las tierras de los adeptos a la causa realista
Así después del triunfo de Boyacá, se configuró el mapa de la propiedad de la tierra en la Gran Colombia, y así lo siguió siendo al desmembrarse ésta, por los apetitos de los “caciques regionales”: Páez en Venezuela, Flórez en el Ecuador y Santander en Colombia, perpetuándose el proceso durante más de 195 años de guerras civiles, que por el poder de la tierra y del gobierno de los Estados Soberanos, Departamentos, etc, continuaron adelantando los “próceres”, haciendo nuevos hacendados, finqueros, medianos y pequeños propietarios, a tantos “generales, coroneles, capitanes, tenientes, sargentos y cabos” que en uno u otro bando, ingresaron a las filas de las tropas al mando del Libertador de cinco naciones; el venezolano; SIMON BOLIVAR de caudillos, guerrilleros patriotas como; Tomas Cipriano de Mosquera, José Hilario López, José María Obando y Julio Arboleda, para solo mencionar al Gran Cauca esclavista, y donde resurgieron las autodefensas o modernos “paracos” realistas en defensa del rey de España Fernando VII, que se desmoronó poco a poco, hasta llegar a la guerra de los “Mil Días”, que cerró el siglo XIX e inauguró el XX , con nuevos propietarios rurales, en gran parte del territorio nacional y con nuevos departamentos, intendencias y Comisarías, en el mapa político de Colombia.

Imbuidos en el bucólico mundo rural de “La Perrilla”, del presidente literato José Manuel Marroquín, -quien se preció de nunca haber conocido el mar y de pronunciar la celebre oración “De que se quejan, si recibí un país y entregué dos”, refiriéndose a la consumación de la usurpación y separación de Panamá propiciado por los Estados Unidos al mando del presidente Rosevelth , en las primeras Décadas del siglo XX, continuamos en buena parte del territorio andino y sus alrededores en especial en el Gran Cauca, con los encomenderos de rancio abolengo como los Arboleda, Angúlos y Mosqueras entre otros, con el predominio de las grandes haciendas poco a poco dedicadas a la ganadería extensiva y con trabajadores agrícolas vinculados la mayoría en calidad de terrajeros o aparceros, sin derecho a la propiedad, viviendo en pequeñas parcelas para su subsistencia y con cuota para “el patrón”, incluido el derecho de “pernada”, con sus mujeres e hijas y sin recibir salario.


En regiones como Antioquia, se presentó un proceso particular en relación a la propiedad de la tierra, con población predominante de pequeños propietarios campesinos con mentalidad y costumbres de trabajo intenso, y principales transportadores de la época con sus recuas de mulas, cargando mercancías de un lado a otro a través de caminos de herradura, desafiando barrizales, ríos y precipicios. Esta característica se acentuó desde mediados del siglo XIX, con el proceso de la colonización “paisa” que primero abarcó lo que hoy es Caldas, Risaralda y Quindío, acompañado de la fundación de ciudades como Armenia, Manizales y Pereira, para citar solo las principales y después alcanzó parte del Tolima y Norte del Valle. Así nació la zona cafetera o Eje Cafetero.

Concentración de la propiedad en la Región Andina

Con la concentración de la propiedad en la región andina y sus valles y mejores tierras, con la colonización antioqueña en marcha, el proceso de “desmontar” se generalizo en muchas regiones del país, movido también por nariñenses, huilenses y caucanos, metidos en las selvas del Caquetá y del Putumayo y así En otras regiones como los llanos orientales colonizados por habitantes de Cundinamarca, Boyacá, los Santanderes y otros orígenes, donde fueron desalojadas las poblaciones indígenas aborígenes, quienes perdieron sus mejores tierras para relegarse a lo alto de las montañas y paramos, perdiendo sus costumbres y cultura. Con este modelo de colonización continuó estimulándose el latifundismo, pues la mayoría de colonos después de talar la selva, iban vendiendo sus “mejoras” a hacendados quienes las dedicaban a la ganadería extensiva y así continúan ampliándose la “frontera agrícola” en todas las regiones del país hasta desembocar con el fenómeno del narcotráfico, que empezó primero con el cultivo de la marihuana para la exportación en la costa Atlántica, en la década del 70 y continuo con el fenómeno del “cultivo industrial” de la coca para procesar la hoja y extraer cocaína, primero artesanalmente, en Bolívar Cauca, gracias a los “Cuerpos de Paz” del programa norteamericano de “la Alianza para el Progreso del presidente Kennedy”,- que enseñaron la refinación del alcaloide-, y después en las selvas de la amazonía, la costa pacifica en el Cauca y en casi todo el país, y también prosperó el cultivo de la amapola, para extraer heroína en la región de Silvia, a partir de los años 90s poniendo en peligro la vegetación, la Fauna de los bosques y paramos de las regiones por encima de los 2000 metros sobre el nivel del mar, sin olvidar que algunos guambianos han sido cultivadores asiduos.

Ya con la irrupción del narcotráfico, la colonización cada vez se fue asociando más con la violencia y mayor fuerza a raíz de la aparición de los grupos paramilitares, que entraron en la confrontación con la guerrilla que tradicionalmente había ocupado los territorios de “frontera agrícola”. A partir de ese momento, las matanzas de Los colonizadores pobres, en regiones como el Naya en el Cauca, tierras de propiedad en su mayoría de la Universidad del Cauca (donadas por el gobierno del general Francisco de Paula Santander), fueron utilizadas como doble estrategia por parte de los paramilitares progobiernistas, para desalojar a quienes llevaban muchos años “desmontando selva”, sin legalizar los predios baldíos como propiedades, buscando así amedrentarlos y desplazarlos apoderándose de esas tierras, para sembrar coca e instalar laboratorios, y las que esperaban legalizar con la complicidad de algunos abogados, notarios y otros funcionarios a los que suelen poner a su servicio, gracias al poder del dinero. Mientras tanto la guerrilla también buscó asegurarse territorialmente el apoyo de los colonos y esta situación preparó el terreno para otras matanzas de seguidores de los paramilitares y también desencadenó en el ingreso del negocio del narcotráfico, primero cobrando el impuesto de gramaje y después, al igual que los “Paras”-autodefensas-, controlando todo el proceso de cultivo, procesamiento y comercialización de la cocaína, y heroína , sin olvidar la marihuana, lo que se constituyó en principal fuente de financiación.
Los efectos de los millones de dólares que ingresaron al país producto del Narcotráfico no solo influyeron en la ampliación de la “frontera agrícola” hacia las regiones selváticas.

La compra de haciendas en la región andina y en los valles como los del Cauca, Patia , Chocó- con el desplazamiento de los campesinos y posteriormente estas fincas y haciendas aparecieron en manos de terratenientes que con dineros oficiales, sembraron miles de hectáreas de palma africana para explotar el aceite de palma-, y Magdalena, así como en los Llanos Orientales, se constituyó en uno de los principales medios para el lavado de dinero, el cobro y ajustes de cuentas, por parte de los nuevos ricos que se apoderaron de las mejores propiedades del país, sin olvidar los efectos sobre predios urbanos y el incremento de la construcción lujosa y la destinada al comercio y la producción.

LA DESMOVILIZACION.

En este marco llegamos al proceso de “desmovilización” y negociación con las autodefensas unidas de Colombia AUC, cuando se acordaron las condiciones de su entrega, las penas por sus crímenes y las medidas de restauración y reparación para las victimas de sus acciones violentas, así como el destino que debe dársele a miles de hectáreas que el Estado les ha expropiado a los narcotraficantes presos y extraditados y la posibilidad de que miles de desplazados por la violencia retornen a las tierras que ocupaban antes de las masacres y en las cuales el Gobierno Nacional del derechista Álvaro Uribe Vélez, busca promover la siembra de la palma africana en el Chocó y “Carimagua” Meta- Vichada, etc.y la explotación forestal , con empresas en las que los paramilitares desmovilizados destinarían grandes sumas de dinero. Mientras tanto, desde el 12 de octubre Día de la Raza- o de la explotación-, los indígenas caucanos han iniciado una oleada De invasiones, según los actuales propietarios De “recuperaciones” y según los indígenas, de numerosas haciendas situadas en los municipios de Silvia, Puracé, Totoró y en las partes planas de los municipios de Corinto y Caloto, en medio de feroces enfrentamientos a piedra y palo y hasta machete, con la fuerza publica que ha intentado en desalojarlos obedeciendo ordenes del gobierno de un descendiente de esclavistas del Cauca, que dicen, no aceptan las presiones y vías de hecho y defienden la propiedad privada, tal como lo establece la Constitución.(Gobierno de Mosquera Chaux).
Así la violencia y el enfrentamiento han sido la constante en la historia de la lucha por la propiedad de la tierra en nuestro país y el mundo, negociaciones estas para poner de acuerdo a las partes en conflicto, tal como intentan hacerlo: el Gobierno Nacional con los paramilitares, y por otra parte en el Cauca, representantes de la Nación, el Departamento, los indígenas, los campesinos mestizos , afro colombianos y los actuales propietarios de la tierra , terratenientes, narcoterroristas y alzados en armas, del conflicto colombiano, ahora que vuelven a resurgir las nuevas autodefensas. AUC, con el remoquete de las “Águilas Negras y otros movimientos delincuenciales emergentes. y que con Marchas multitudinarias en todo el Mundo, el pueblo colombiano busca la Paz y la entrega de los cientos de secuestrados que tiene las FARC, y que las AUC. Confiesen los miles de secuestrados que asesinaron y le señalen a la Fiscalía, las fosas comunes donde los depositaron descuartizados, según testimonios de “Don” Berna, “Don “Jorge 40,”Don”Mancuso, “Don” HH y hasta “Don” H.P, y toda esa cáfila de “serviciales barones” progobiernistas, y que se aclaren los miles de casos de la violencia de Estado, como el de Jamundí y se reabra el de Guitarrilla, sujetos que hoy están acompañando al 50 por ciento de los “honorables”

Senadores y Representantes de la República en las cárceles de máxima seguridad. Esperando un infinito paseo a la tierra del Tío Sam.
De esta manera, Colombia también marchó multitudinariamente en todo el Mundo el pasado 6 de marzo del 2008, exigiendo la paz del país, la entrega de todos los secuestrados y de la ex candidata presidencial; INGRID BETANCURT, y no más guerra. así también con temor, de posteriormente no poder sacar de nuestro territorio patrio a más de mil quinientos “asesores militares norteamericanos”, y a casi medio centenar de mercenarios (contratistas) gringos, que andan buscando por la Amazonía a los tres mercenarios yanquis rehenes de la FARC, capturados hace más de seis años merodeando , sobrevolando y fotografiando las selvas colombianas. Y con el pensamiento abierto y el deseo expansionista e inmenso de entrarse a Venezuela, como lo hicieron con Panamá. -I took Panamá-, como lo dijera Teodoro Roosevelt.
DISFRUTE EL INTERMEDIO CON MUSICA DE PAUL MAURIAT


SOBRE EL BICENTENARIO DE LA INDEPENDENCIA DE COLOMBIA. 1810-2010
Ver página: http://www.lablaa.org/bicentenario/index.html


La Red de Bibliotecas del Banco de la República, con motivo del Bicentenario de la Independencia, quiere ofrecer a todos los colombianos un espacio donde se pueda leer un buen número de documentos producidos desde 1750 hasta 1850 en distintos lugares, instancias y circunstancias. Esperamos que muchos colombianos de todas las edades encuentren aquí documentación de interés para iniciar al menos las respuestas a las preguntas que quieran hacerle al pasado. Este espacio se estará construyendo desde ahora, centrándose primero en torno a 1810 y luego ampliándose hacia atrás y hacia delante y, en lo posible, profundizando. No será exhaustivo pero si esperamos que tenga una cobertura básica para las distintas regiones del país. Estarán en principio los documentos que ya estén impresos y publicados.

Entendemos el período denominado la Independencia como un tiempo fuerte, especialmente para la producción y la búsqueda de sentidos. Las referencias más frecuentes nos remiten colegios, prensa, Expedición Botánica, Biblioteca Real, Comuneros, Misiones, Reformas, tertulias, viajes, chicherías, viruelas, cabildos, juntas y conspiraciones. De ello nos quedan reales cédulas y decretos, periódicos, libelos y pasquines, pinturas, sermones, relaciones y memoriales, diarios, manuales, proyectos, mapas, discursos, juicios, proclamas, constituciones y actas. En el período emergen multitud de discursos desde distintas ciudades y pueblos, las palabras adquieren nuevos significados, se proponen nuevas legitimidades e identidades de sujetos y grupos, se rediseña el mapa de lealtades sociales, políticas y religiosas, y las tensiones cotidianas se hacen más visibles aun al interior de las familias. Hay cambios en las formas en que sesiente, se vive y se dice lo público y el orden social. Es un tiempo de invención de sujetos políticos y de sociabilidades, de nuevos medios como la prensa, y de la instauración de muchos nuevos lugares desde donde se interviene en la palestra política. Pero sobre todo un tiempo de muchas palabras y de incremento de la escritura y la lectura.

Por eso hacemos del Bicentenario una ocasión para poner a disposición de diferentes públicos lectores, un repertorio de textos e imágenes, relacionados de maneras distintas con los procesos de la independencia. Exponemos los documentos no porque creamos que ellos contengan la verdad ni lo que “realmente pasó”, sino porque son los registros contemporáneos a los que tenemos acceso. Esperamos que su lectura y análisis contribuyan a proponer nuevas preguntas por parte de distintos públicos lectores, a entender mejor la diversidad de procesos del período, sus sentidos y significados y a elaborar historias múltiples, desde distintos puntos de vista, espacios y sujetos que quizás puedan contribuir a articular una representación de nuestro pasado para el presente.

Ver página: http://www.lablaa.org/bicentenario/index.html
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PORTAL ECOTURISTICO Y MULTICULTURAL DEL CAUCA


es un proyecto institucional de la Universidad del Cauca (Colombia) que, mediando un período de ejecución de dos años, busca construir un portal de Internet sustentado en una “base de conocimientos” mediante la utilización efectiva de las Nuevas Tecnologías de la Información y las Comunicaciones, para posicionar en el mercado turístico europeo la imagen de Popayán y el departamento del Cauca, mediante un producto claramente diferenciado sustentado en su Patrimonio Ecoturístico y Multi-Cultural. Su dinámica ha permitido articular los esfuerzos de actores sectoriales antes dispersos hacia el desarrollo de esta importante actividad.

El Departamento del Cauca posee inobjetables potencialidades para el desarrollo de su actividad turística aún no aprovechadas ni rentabilizadas bajo parámetros de sostenibilidad social y ambiental para dinamizar procesos de desarrollo y mejoramiento de la calidad de vida de los habitantes. Adicionalmente la región no cuenta con una estructura que articule los agentes sociales implicados con esta actividad; ello motivó la iniciativa de tres grupos interdisciplinarios de investigación de la Universidad del Cauca (Desarrollo Turístico, Ingeniería Telemática y Diseño Gráfico), con apoyo irrestricto del Sistema Institucional de Investigaciones, en consonancia con los preceptos Constitucionales y legales colombianos (Ley 300 de 1996).

El turismo como “industria de la paz” convierte esta actividad en prioritaria para la concordia, la integración, la cultura y la sostenibilidad, en una región duramente golpeada por distintas formas de violencia. Poner en evidencia las características únicas del Cauca en materia ecológica y multicultural, permitirá consolidar estos propósitos.

El desarrollo del proyecto ha comprometido recursos en una cuantía cercana a los ciento cuarenta y siete mil dólares americanos, todos ellos provenientes del presupuesto de la Universidad del Cauca con contribuciones puntuales del Servicio Nacional de Aprendizaje regional y de la Unidad Administrativa Especial del Sistema de Parques Nacionales Naturales, aproximada a tres mil mil quinientos dólares, representados en la participación de algunos de sus funcionarios durante las dos fases programadas.

ASPECTOS DE SOSTENIBILIDAD DEL PROYECTO / INICIATIVA DE ECOTURISMO

(a) CONTRIBUCIÓN A LA CONSERVACIÓN DE ÁREAS NATURALES:


Promover las áreas ecológicas regionales garantiza su conservación. Focalizado el proyecto hacia un turista que no acepta la degradación ambiental, el flujo de visitantes fortalecerá la gestión del Sistema de Parques Naturales y la de los propietarios de reservas privadas, reduciendo la presión y el impacto negativo sobre ellas.

(b) BENEFICIOS ECONÓMICOS GENERADOS POR EL PROYECTO PARA ORGANIZACIONES, AUTORIDADES O COMUNIDADES QUE GESTIONEN ÁREAS NATURALES CON PROPÓSITOS DE CONSERVACIÓN.

Se dinamizará la acción de los operadores turísticos con efectos multiplicadores evidentes para la economía local; el Sistema de Parques Naturales y las reservas privadas se verán beneficiados y las comunidades mejorarán su calidad de vida merced al incremento de los ingresos inducidos por el fortalecimiento de la actividad ecoturística.

(c) PARTICIPACIÓN Y BENEFICIOS PARA LAS COMUNIDADES:

La Unidad de Parques Nacionales ha inducido la participación activa de los habitantes locales en actividades como guianza, diseño de senderos interpretativos, provisión de servicios al visitante y comercio artesanal. El Sistema de Formación y Educación promovido por la Universidad del Cauca se convertirá en un potenciador de estos procesos.

(d) EDUCACIÓN E INTERPRETACIÓN DE LOS VALORES NATURALES Y CULTURALES:

Tampu en su esencia se constituye en un medio apropiado para potenciar el conocimiento de la población local y sensibilizarla hacia el fortalecimiento de sus valores naturales y culturales e involucra al público receptor en la valoración y conservación de ese patrimonio mediante la base de conocimientos que lo sustenta.



(e) PRÁCTICAS AMBIENTALES EN LA CREACIÓN Y GESTIÓN DE INSTALACIONES, ESTABLECIMIENTOS Y SERVICIOS ECOTURÍSTICOS: Tampu sensibilizará a los prestadores de servicios turísticos sobre la utilización de prácticas innovadoras para gestión y conservación de las reservas naturales tangibilizadas como productos turísticos. Estas prácticas son además el plato fuerte del programa de licenciatura en turismo aprobado por la Universidad del Cauca en 1999 , asociado al proyecto.

Integrantes

Helvia Frieda Braendly de Bucheli - helvialy@emtel.net.co
Celia Marina Avila - celiamarina@terra.com.co
Francois Gravel - fgravel@unicauca.edu.co
Olga Patricia Solís Valencia - osolis@unicauca.edu.co
Andrés José Castrillón Muñoz - andresj9@unicauca.edu.co
Diógenes Patino - diopatin@unicauca.edu.co
Borgia Acosta - bacosta@unicauca.edu.co



Departamento:
Cauca
Pais:
Colombia
Correo:
tampu@unicauca.edu.co
URL:
tampu.unicauca.edu.co


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EL BAJO CAUCA ESTA QUE ARDE, LA VIOLENCIA ESTÁ DISPARADA

Resultados de Ejército y Policía hacen creer que la situación está controlada.


En plena misa dominical y delante de cientos de feligreses en la parroquia de Tarazá, el padre Elkin increpó a la Policía y al Ejército. Era el último domingo de abril y una balacera entre dos bandas criminales -a media cuadra de la plaza central- había interrumpido la tranquilidad de los campesinos que vieron cómo policías y soldados se escondían en la estación en vez de tratar de controlar a los bandidos.

"No sean vendidos y regalados", les gritó el sacerdote, cansado, tal vez, de una situación que se viene dando desde hace meses, pero de la que nadie se atreve a hablar: la posible connivencia entre miembros del Ejército con las bandas criminales. Y como él, en los municipios del Bagre, Caucasia, Zaragoza, Cáceres y Nechí, que conforman el Bajo Cauca antioqueño, también están agotados por el miedo.

Las bandas de Urabá y de los 'Paisas' se están disputando a muerte esta zona desde cuando el bloque mineros de las AUC se desmovilizó el 20 de enero de 2006. Según la Policía, el año pasado hubo 200 homicidios -fue la región más violenta de Antioquia- y sólo en los primeros cuatro meses de este año se han dado 102 asesinatos. Una tasa desproporcionada para cerca de 300.000 habitantes.

La situación es tan crítica, que hasta las autoridades médicas han lanzado un SOS al gobierno local y departamental. La morgue de Caucasia -que es la única que hay para todo el Bajo Cauca- ha tenido seis médicos forenses en los últimos seis años: o renuncian o piden traslado por el exceso de trabajo. Incluso, durante buena parte de 2007 y 2008, esta región se quedó sin un especialista forense. Sólo a partir de este año se logró contratar a Janeth Pacheco, quien trabaja en un pequeño cuarto del hospital municipal con una sola mesa para necropsias y dos cavas.

En medio de la crisis, SEMANA tuvo acceso a una grabación que podría explicar en buena parte por qué ha sido tan difícil controlar la violencia en esta región. En el diálogo, 'Rodrigo', cabecilla de La 'banda de Urabá', habla de una balacera con la banda enemiga, la de los 'Paisas', el pasado 23 de marzo en una zona de Tarazá conocida como Santa Clara. Uno de sus hombres le deja entrever a 'Rodrigo' que miembros del Ejército al mando de un teniente estaban apoyando al cabecilla de los 'Paisas', conocido como alias 'Víctor Caparrapo', y que en el enfrentamiento quedaron heridos el teniente Solarte y un soldado.

El caso está en investigación. Los militares, curiosamente, pusieron la denuncia sobre el ataque no en el sitio en el que ocurrieron los hechos, ni tampoco en Caucasia, donde los llevaron al hospital, sino en Yarumal, un municipio que no es de la región. Están investigando si el teniente John Solarte, adscrito al Batallón Rifles, le daba información privilegiada a la banda de los 'Paisas'. El coronel Mauricio Mantilla, quien lleva 15 días como comandante del Batallón, le dijo a SEMANA: "Yo no puedo tapar el sol con una mano sobre lo que sucede con algunos hombres del Ejército, pero aún no puedo pronunciarme sobre los resultados de esa investigación".

Pero esta terrible situación no es fortuita. El combustible que alimenta la disputa entre bandas criminales sigue siendo el narcotráfico. Después de la captura, hace un mes, de Daniel Rendón, alias 'Don Mario', a quien las autoridades le achacaban casi todos los muertos de la zona, las cosas no han cambiado. El Bajo Cauca no sólo es la zona más violenta de Antioquia, sino la tercera en producción de coca del país. Además, por esta ruta se sale directo al golfo de Morrosquillo, donde el narcotráfico tiene varios puertos naturales. El Bajo Cauca limita con Córdoba. Es un corredor estratégico de la guerrilla y los paramilitares por su cercanía con el Nudo del Paramillo y por su conexión directa con el Urabá antioqueño.

Hace poco fue expropiada una empresa de vigilancia privada de Caucasia llamada Serviescol Ltda., administrada por Jorge Ocampo, un capitán retirado del Ejército a quien conocían con el alias el 'Capi', y quien también perteneció al Batallón Rifles. Esta empresa manejaba vínculos con los hombres de alias 'Macaco', líder paramilitar extraditado hace un año a Estados Unidos, y con la banda de los 'Paisas'.

SEMANA también conoció denuncias contra la Red de Cooperantes del Bajo Cauca (Recobac), un grupo de hombres desmovilizados del bloque Mineros que crearon una especie de 'Convivir' y controlan la vigilancia de la región. Además de contar con armas amparadas, Recobac heredó los equipos de comunicación de alta tecnología del ex jefe paramilitar Ramiro 'Cuco' Vanoy, con los que pueden interceptar llamadas de celular. Incluso, se sabe que varios de los escoltas de Víctor Manuel Mejía, alias el 'Mellizo', muerto hace un año por la Policía en una finca de Tarazá, tenían equipos de comunicación de la Red. Ellos son quienes deciden quién entra y quién sale del pueblo, tienen información sobre diligencias judiciales y cada vez que una persona nueva visita la zona, tiene que informarles el motivo de la visita y cuánto planea quedarse, como si se tratara de agentes de inmigración.

Varios líderes campesinos consultados por SEMANA creen que la única vía de escape para la caótica situación del Bajo Cauca no sólo sería acabar con la red de cooperantes, sino renovar a todos los hombres del Ejército y de la Policía: "Cómo es posible que haya una masacre de seis personas a las 7 de la mañana sin que las autoridades hagan algo", dijo uno de ellos, al referirse al hecho ocurrido en abril en el corregimiento El Doce. Como tantas veces, ellas brillaron por su ausencia.

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